Muchas gracias compañeras Consejeras y Consejeros integrantes de la Comisión Política Permanente.
En primer lugar, quiero agradecer y reconocer siempre su respaldo, su apoyo, su compromiso para fortalecer los trabajos de este órgano colegiado de decisión y dirección de nuestro instituto político.
Gracias por su afecto, por su apoyo, por su solidaridad, por brindarnos la confianza para conducir los destinos no solo del partido, sino de diseñar con inteligencia, con estrategia y con criterios claros la conducción de un Frente Amplio sólido, fuerte, donde el Partido Revolucionario Institucional marca esa esencia y ese rumbo de mejor destino para México.
Amigas y amigos:
Considero importante compartir aquí, con todos ustedes, en este órgano colegiado de gobierno permanente, algunas reflexiones que vivimos en estos días y en estos tiempos.
No sin antes reconocer la presencia de nuestros Consejeros integrantes de esta Comisión, de los expresidentes del Comité Ejecutivo Nacional, de los dirigentes de los sectores y de las organizaciones, de nuestra Secretaria General.
Del presidente de la Comisión Nacional de Procesos Internos, de la presidenta nacional de la Comisión de Postulación para las candidatas y candidatos en el 2023 y 2024, y a todas y todos ustedes, saludarlos con reconocimiento y aprecio.
Quiero decirles que recibir el día de hoy a una compañera, que hoy es compañera nuestra, parte del Frente Amplio por México, es muestra de que el PRI cumple con los procesos no solo legales, con los procesos marcados políticamente en este tiempo para ir fortaleciendo la construcción del Frente Amplio por México.
Hoy recibimos a Xóchitl Gálvez en la sede de nuestro partido pero sobre todo para registrar esa precandidatura nuestra. Decirles que le hemos brindado a Xóchitl hoy y le brindaremos siempre nuestro respaldo más amplio y nuestro apoyo total, hoy precandidata del PRI del Frente Amplio por México a la presidencia de la República.
Lo digo con firmeza con claridad y con contundencia: Xóchitl Gálvez es y será la precandidata a la Presidencia de la República del PRI, del Frente Amplio por México, y del apoyo del pueblo de México, la próxima Presidenta de la República.
Xóchitl Gálvez se perfila para conducir una campaña política firme y sólida, para ganarnos la confianza de los ciudadanos. Mantenemos y mantendremos siempre con ella un dialogo franco, profundo y constante en el PRI.
Vamos a recorrer juntos el país, por eso celebro que los cuadros políticos de nuestro partido la respalden y la apoyen, que nuestra militancia esté con ella y junto a ella.
Y quiero aprovechar desde aquí para reconocer ampliamente a los 32 comités directivos estatales, a sus presidentas y a sus presidentes, a los 2,450 comités municipales y a los 88,936 seccionales.
Esa es la militancia del PRI y ustedes son la fuerza y la fortaleza del partido.
Gracias por su apoyo y su respaldo siempre.
Por ello, estamos en medio de un proceso político cuya piedra angular es la unidad. La unidad interna en el partido, la unidad interna en el Frente Amplio por México.
El PRI impulsará la campaña de Xóchitl con todo, como sé que lo hará el Partido Acción Nacional y el Partido de la Revolución Democrática.
Y sé que se va a hacer y se va a lograr generar arraigo, cercanía, ese profundo compromiso con nuestra gente.
Desde que iniciamos la integración y el trabajo del Frente Amplio tenemos la mirada puesta en recuperar la presidencia de la República en el 2024. En ganar la mayoría en el Congreso de la Unión, en ganar los nueve estados de la República incluyendo la Ciudad de México, y Xóchilt y el Frente Amplio somos una sola pieza, un bloque monolítico que tenemos que caminar juntos para ganarnos la confianza de la gente.
El PRI ha entendido que estamos ante nuevos tiempos y que en los hechos tuvimos que cambiar, tuvimos que impulsar la renovación, tuvimos que caminar juntos para salir adelante.
Pero no todos y otros que se decían priistas no han sabido entender que ese proceso había llegado, que llegó y que el PRI debía impulsarlo.
Algunos de esos cuadros que gozaron de las mayores oportunidades dentro del PRI y dentro de nuestras filas, y obtuvieron las posiciones más elevadas y más importantes, se niegan ahora a alinear su participación con las definiciones y la estrategia del partido.
Se trata de cuadros que hablaban de disciplina cuando ésta jugaba a su favor, pero cuando les toca a quienes deben disciplinarse, se niegan a hacerlo.
Cuando el partido los favoreció todo estuvo bien, aunque el propio partido acabara perdiendo; pero cuando se trata de que apoyen a otros militantes, se resisten a hacerlo, porque piensan que ellos deben estar primero.
Si se piensa que son los intereses de los cuadros políticos lo que organiza y lo que hace, no gusta muchas veces. En vez de que apoyen y respalden, siempre están señalando que son puros errores en el partido.
Lo digo fuerte y lo digo claro y que oigan bien: las filas del PRI no admiten mercenarios de la política, el PRI no es agencia de empleo, ni agencia de colocaciones.
Entiéndase que estamos defendiendo la patria, defendiendo la democracia, aquella que está al borde de extraviarse por culpa de un gobierno autoritario, populista y corrupto como el de Morena.
No estamos en una competencia y menos en una normalidad democrática. El gobierno pretende avasallar a las instituciones, avasallarnos a nosotros, a todos los partidos políticos de oposición.
Vivimos asediados, espiados y sujetos a una campaña permanente de desprestigio, de calumnia y de ataques. El gobierno pretende debilitarnos y fracturarnos y, para lograrlo, ofrece prebendas a los cuadros de nuestro partido que se dejan someter a ello, que no tienen carácter, que no tienen valor, que no tienen valor por este país y menos tienen categoría política, que eso a los priistas nos sobra.
Por eso, ni nos van a doblar, ni nos van a asustar, aquí vamos a segur firmes, defendiendo de pie y defendiendo a México.
Por ello, desde esa perspectiva, atravesamos por la etapa más dura de nuestra historia en cuanto a renuncias y expulsiones, por haber faltado a los compromisos básicos y éticos con la organización política nuestra. Pero tengan claro que el PRI nunca, jamás, va a premiar la deslealtad.
La lealtad es una decisión, es una convicción de vida. La lealtad no se impone por la fuerza. Se es leal o simplemente no lo es.
Todos aquellos que se han ido, lo han hecho por la puerta de atrás, sin vergüenza y sin dignidad. Bien lo dice el dicho: “con los Judas no se pelea, ellos se ahorcan solos”.
Enfrentamos una doble amenaza: una que viene desde el interior de nuestra propia estructura y otra que proviene del gobierno y, no pocas veces, una y otra se entremezclan.
Así, el gobierno logra atraer a algunos de nuestros cuadros, y algunos de esos cuadros tienen como reacción repudiar y sustraerse del partido cuando no se cumplen sus ambiciones, pues ya encontraron ahí, ya encontraron quien sí lo hace.
Otros, rompen con el partido porque no pueden verse sin los espacios que han detentado siempre.
Como decía, para hacer frente a esa situación, hemos tenido que cambiar, tenemos que modernizarnos e impulsar una nueva forma de hacer política. Se realizaron reformas a nuestros Estatutos, que han permitido fortalecer la integración nacional de nuestro partido, como también la capacidad de articularlo desde la dirigencia, a fin de generar cohesión, unidad, dirección, disciplina, compromiso y objetivos claros en el presente y futuro del partido.
Por esa vía es que en la Cámara de Diputados hemos podido mantenernos sin fisuras y como una oposición sólida, crítica y combativa. Así lo hemos hecho las y los legisladores, mi reconocimiento a las y los diputados federales.
Mi reconocimiento a las y los senadores de la República y a todos los legisladores locales y representantes populares de nuestro partido.
Así ha sido porque entendemos que el momento político y el papel que hoy nos toca desempeñar es fundamental para la vida de la República. De no hacerlo, de no hacerlo así, nos hubiéramos convertido en un partido sin identidad, asimilado por el gobierno y en pronta extinción.
Mientras el gobierno quiere derribar el régimen democrático, nosotros nos hemos comprometido en ser de los principales constructores de la democracia y la fortaleza de las instituciones.
Nuestra lucha ha tenido que rescatar y reunir las contribuciones que juntos hicimos, el PRI, el PAN y el PRD a favor de ella; tres partidos políticos que impulsaron el proceso democrático en México y que hoy vamos en una misma dirección: generar libertades y fortalezas para las y los mexicanos.
Amigas y amigos:
Dos razones animan nuestra alianza. Una, es que eleva nuestra competitividad electoral y la otra, es que brinda continuidad a la lucha que hemos llevado a cabo juntos a favor de la democracia, de las alianzas y de los gobiernos de coalición.
E Frente Amplio tiene claro un sentido estratégico, se constituye como una vida cierta de lucha por el poder y cuenta con una clara visión del poder. Y vamos a impulsar la verdadera reforma del poder, no sólo cómo se llega al poder, sino cómo se ejerce el poder, con un nuevo pacto social a favor de todos los ciudadanos en beneficio de las familias mexicanas.
Nos postulamos como una oposición que representa una alternativa real y viable de gobierno.
Hace tiempo que decidimos no ser una oposición complaciente, hemos pagado cara esa convicción, pero por alto que sea el costo, es la mejor decisión que hemos podido tomar de cara a nuestro país.
Somos responsables, congruentes, con la exigencia que representa nuestra corriente política con el pueblo de México y con las futuras generaciones.
Hemos construido un proyecto ganador, un proyecto que disputará con éxito la Presidencia de la República, vamos a recomponer los equilibrios necesarios en el Congreso de la Unión.
Y lo digo firme y claro, a quienes traicionan, lo digo: intentar romper la unidad del PRI no sólo es un propósito mezquino, sino tremendamente irresponsable. Tratar de romper al PRI representa dar camino abierto al autoritarismo, una vía para deshacer los equilibrios y contrapesos. Tratar de romper al PRI representa negarle a México la posibilidad de recuperar el rumbo.
Esta dirigencia ha tenido que tomar las decisiones más trascendentales en la historia de nuestro partido, pero fueron necesarias para la supervivencia de nuestro instituto político. Era imposible que el partido subsistiera después del daño que le hicieron quienes nos precedieron en las responsabilidades del gobierno y le fallaron con los hechos de corrupción y traicionaron, siendo no sólo irresponsables, dejando a la sociedad sin escucharla.
Fue necesario introducir los cambios necesarios y lo hicimos. Desde entonces se presentaron inconformes y hasta se escenificó una toma de las instalaciones de nuestro partido marcada por la agresión, que incluso ocasionó lesiones graves a nuestros militantes.
Debe uno entonces preguntarse a quién le hacen el juego esos disque disidentes que estaban. Yo les respondo con carácter, con firmeza y con convicción: terminan siendo cómplices del gobierno y promotores de una estrategia para tratar de debilitar al PRI.
No tengan duda: jamás lo van a lograr, aquí hay dirigencia, aquí hay carácter y acá hay decisión.
La estricta perspectiva y ambición personal da cauce a muchos de esos que se dicen disidentes; en el fondo su motivación es un individualismo exacerbado, irresponsable y excluyente.
No sólo se han querido ir y se han ido del partido, sino que también, en paralelo, han tratado de infringir graves daños a nuestra organización, para querer herirla de muerte.
No lo van a lograr. Se olvidan de causas de lucha, de programas, de propuestas y de identidades ideológicas. Viven para sí mismos, hundidos en una egolatría que los hace creer que sus pretensiones personales deben de dominar el escenario político.
Pero del lado del gobierno les dan cabida, no importando que se desnaturalicen así en su proyecto y en su programa. Pasar al lado del gobierno es una manera efectiva de salvar las críticas, los riesgos de ser investigado y, sobre todo, quieren salvar el pellejo por cobardes, miedosos, faltos de carácter y no defender al PRI y no defender a nuestro país.
¿Qué respuesta debemos dar nosotros? La unidad debe ser nuestra gran respuesta. Debemos mostrar que debemos de trabajar juntos y en equipo. Nos corresponde actuar para probar que quienes nos quedamos en el PRI aquí estamos, firmes, listos, dando la lucha por el presente y el futuro de México.
Tenemos que responder con una gran cohesión, con una gran fraternidad, con compañerismo, con unidad, con solidaridad, como somos los priistas. Lo mejor del PRI se quedó en el PRI. Por eso tenemos que mostrar nuestra mística, la fuerza de integración que proviene de reconocernos en el trabajo político, en el espíritu de equipo y en lograr los nuevos triunfos para nuestra organización política.
Cuando tuvimos la fuerza cohesionadora del gobierno, y cuando a la falta de la Presidencia de la República, que no tuvimos, supimos agruparnos a través de nuestros gobiernos estatales y pudimos ser una organización más diversa.
En las actuales circunstancias, tenemos el reto de construir una organización mejor integrada, mejor vinculada, más ligera y versátil. El imperativo que tenemos es entender el tiempo que vivimos y asimilar sus grandes retos.
A ese propósito responde la realización de esta Sesión de la Comisión Política Permanente del Consejo Político Nacional. Este es un gran momento, compañeras y compañeros, es la oportunidad de dar un paso de gigante que necesitamos para afirmar, para renovar, para fortalecer la nueva etapa del Partido Revolucionario Institucional.
Un PRI que aprende de su historia, pero que por eso mismo debe escribir y proyectar una nueva historia. Ahora nos corresponde cohesionarnos a través de nuestra propia determinación y activismo político; esa cohesión no provendrá del gobierno, tendrá que emanar de cada uno de nosotros mismos, con el trabajo diario.
Por ello, las elecciones del 2024 nos van a poner sin duda a prueba, pero esa prueba habremos de pasarla con grandes calificaciones, porque como dice uno de los mensajes que inscribimos en los espectaculares: “lo mejor del PRI, se quedó en el PRI”.
El PRI ha dejado de contar con cuadros que demostraron no ser verdaderos cuadros políticos; probaron que ocupaban espacios sin llenarlos y que eran los campeones en demandar posiciones y en carecer de una posición de compromiso verdadero.
Una vez que ya no están con nosotros los falsos militantes, los que se especializaron en simular y en engañar; una vez que ya no están entre nosotros, somos más fuertes, contamos con mayor mística y con mejor ejemplo.
Estamos listos para ganar la Presidencia de la República con Xóchitl Gálvez. Estamos listos para ganar el Congreso federal, los Congresos locales, las alcaldías, las nueve gubernaturas, incluyendo la Ciudad de México.
Estamos listos para dar paso a una nueva alternancia en el poder. Estamos listos para construir una nueva etapa en la vida de México, desde los gobiernos de coalición.
Este es un momento de definiciones y el PRI jamás será definido por los que declinan, sino por los que nos quedamos para seguir luchando.
Quienes nos quedamos para seguir luchando, aquí en el PRI, tenemos grandes fortalezas. Tenemos la gran fuerza de la lealtad, de las convicciones, de la congruencia, de la unidad y de la cohesión.
Y hoy les digo: hoy me siento profundamente orgulloso de ser militante del PRI.
¡Vamos con todo y vamos a ganar!
¡Qué viva el PRI!
¡Qué viva el PRI!
¡Qué viva el PRI!
---000---
