Compañeras y compañeros de partido:
Antes de iniciar y mandar un mensaje a la militancia priista en todo el país, a las y los mexicanos, quiero agradecer la presencia de todas y de todos ustedes, de las y los Consejeros Políticos Nacionales.
Saludar a quienes nos ven también a través de las plataformas digitales, a los compañeros amigos de los medios de comunicación y decirles que hoy hemos cumplido con una jornada electoral ejemplar.
Todos los que hemos estado aquí presentes participamos de manera transparente, democrática, con urnas, como lo sabemos hacer en el Partido Revolucionario Institucional, con amplia participación, pero sobre todo, aquí se decidió, libre transparente y de manera secreta el voto de las y los Consejeros Políticos Nacionales.
Por ello, también hay que precisar que aquí lo que tenemos nosotros es el cumplimiento a cabalidad, en este proceso interno de nuestro instituto político y que hemos cumplido en tiempo y forma con todo el procedimiento, todo el andamiaje jurídico, para que cuidado y apegado a la ley, a los organismos jurisdiccionales, no solo cumplimos con nuestras convocatorias y con nuestras normas, sino cumplimos con respetar la voluntad de las y los priistas.
Por ello, hoy quiero saludar a los integrantes de este órgano el día de hoy, a quienes decidieron de manera libre y secreta; agradezco a todas y a todos ustedes.
Y a nombre de Carolina Viggiano Austria, compañera de lucha y referente de todos los priistas, quiero agradecer y extender un amplio pero muy sentido agradecimiento a las y los integrantes de la Comisión Nacional de Procesos Internos, que hicieron un trabajo profesional, íntegro cuidadoso, democrático, al interior del Partido Revolucionario Institucional; reconozco a todas y a todos ellos, y a su presidente.
Principalmente, también, quiero destacar el apoyo, el trabajo, el compromiso, el profesionalismo de quien sin duda ha destacado siempre por su trabajo comprometido, a quien estuvo al frente del partido: a la Presidenta del Comité Ejecutivo Nacional en su momento, a Graciela Ortiz, mucha gracias por tu trabajo, y muchas gracias a nuestro Secretario General, Miguel Alonso Reyes; muchas gracias a esa dirigencia que tuvo la capacidad para cumplir con el reto de este proceso.
Y también quiero significar ese trabajo comprometido de quienes hoy han formado esta estructura en todo nuestro país. El andamiaje para convocar, para implementar el desarrollo de este proceso, que no fue fácil, pero que lo hicimos basados no solo en la apertura, lo hicimos basados en el momento y en el tiempo.
Nada a espaldas de nadie, en el partido se cumplió de una manera cabal y profesional el trabajo comprometido de la Comisión Nacional de Procesos Internos, de sus órganos auxiliares, porque en todo momento se cumplió no solo con la difusión, con la publicidad, sino en el cumplimiento puntual de las convocatorias emitidas y por ello lo tengo que reiterar: muchas gracias a todas las integrantes y a todos los integrantes de la Comisión y a su Presidente, el diputado Pablo Angulo Briceño.
Sin lugar a dudas este proceso se caracterizó por un desarrollo abierto, transparente, incluyente y competitivo, en el que todos quienes participamos en él, quienes aspiramos a estar en la dirigencia, lo hicimos en igualdad de circunstancias.
Y quiero aprovechar para mandar un mensaje a la militancia priista y a quienes nos ven a través de las plataformas digitales y los medios de comunicación.
Esta dirigencia hoy electa que encabezamos Carolina Viggiano y un servidor, hemos participado en los dos métodos también que están señalados en los Documentos Básicos y que uno igual de democrático que el otro, y hay que decirlo para que algunos que se les quiere olvidar lo tengan muy presente.
Carolina Viggiano y un servidor tuvimos obtuvimos cerca de dos millones de votos en el pasado proceso de la dirigencia nacional anterior y el día de hoy obtuvimos el respaldo de más del 97 por ciento de las y los priistas. Tan democrático un proceso como el otro, pero el contexto político nacional y del partido es el que las y los priistas estamos llamados a cuidar y a respetar.
Por ello, estamos muy agradecidos y muy reconocidos, hoy, porque nos han dado su confianza, a las y los consejeros políticos.
Y con respeto les digo a quienes no lo hicieron aquí siempre estamos para escuchar, para incluir, para sumar a todas las expresiones que conviven en el partido.
Por ello, hoy necesitamos impulsar un proyecto de partido con fuerza, con fortaleza, con potencia, para impulsar las necesarias reformas que debemos de impulsar para catapultar a nuestro partido a una posición de mayor protagonismo en la arena pública, acorde a la grandeza histórica de nuestro instituto político, como el constructor de las instituciones en nuestro país.
Quiero de manera muy especial, con enorme respeto, con enorme compromiso, con ese reconocimiento que los priistas siempre tenemos, a quienes actúan con profesionalismo, con generosidad con el partido, pero sobre todo demostrando ese compromiso de sumar por nuestro instituto político: reconozco especialmente la participación de mi compañera Lorena Piñón Rivera hoy en este proceso.
Reconozco a Lorena como candidata a la Presidencia del Comité Ejecutivo Nacional y a un joven como lo es también Lorena, a Cuauhtémoc Betanzos, como candidato a Secretario General. A ellos, a dos jóvenes, que los que están afuera no se equivocan y no se equivoquen, dos jóvenes que hoy tuvieron la oportunidad de participar en el proceso interno de nuestro instituto político, ellos son la nueva generación de perfiles que están llamados a ocupar un lugar en el proceso de renovación de nuestro instituto político.
Lorena y Cuauhtémoc compitieron en buena lid, con el mayor ánimo de construir y presentaron su proyecto y plataforma para encabezar al partido. Hoy les quiero decir que esas son las propuestas nuevas, la visión distinta que el partido necesita impulsar al interior de nuestro instituto político y por ello es un compromiso que hago con ellos, y públicamente, que cada una de las propuestas que presentó Lorena y Cuauhtémoc, tendrán un lugar en la plataforma y en el proyecto de trabajo, para enriquecer el proyecto del partido y llevarlos a cabo.
Hoy públicamente los quiero invitar a seguir colaborando de manera estrecha con las tareas del partido. El PRI necesita mujeres y hombres con carácter, necesita jóvenes, necesita experiencia, con visión, con gran talento político, como lo han demostrado.
Ellos demostraron el carácter, la valentía, la voluntad, el atreverse a participar en un proceso interno del partido para que la militancia los escuche y hoy les digo que la militancia del PRI se siente orgullosa de ustedes, porque tuvieron el valor, el talante y el talento de participar en este proceso interno de manera genuina. Nuestro respeto y nuestro compromiso con ustedes.
Compañeras y compañeros:
Nos encontramos en un momento crucial. Y el PRI, como un partido de arraigo y de firme convicción, debe mostrar capacidad para volver, para resolver el mayor desafío que se nos ponga por delante.
El desafío es renovarnos, es reformarnos y es recuperar la confianza ciudadana.
La elección del 2 de junio impuso sobre nosotros una obligación de replantear el rumbo.
No vamos a ocultar que el partido se encuentra en la posición más compleja que hemos tenido en nuestra historia.
Tampoco negaremos que el partido ha perdido terreno, apoyo popular y cargos de representación.
Para un partido con el prestigio, la casta y el gen ganador como el nuestro, la posición en la que hoy estamos debería ser inadmisible.
Sin embargo, no podemos ni debemos sucumbir ante el fatalismo, ni a los ataques, ni a los malos augurios de quienes por años han deseado ver al PRI tocar el fondo y el abismo.
Hoy, tenemos que partir de la base que nos da el fortalecer y el construir la unidad e impulsar y reconocer la lealtad de los que estamos aquí, y de los millones de priistas que nos dieron su apoyo y su respaldo el pasado 2 de junio.
De los que por más compleja que se presente la situación, aquí seguimos, y aquí estamos.
De los que portamos con orgullo los colores del Partido Revolucionario Institucional.
De los que entendemos el peso de su escudo y el verdadero significado de nuestras siglas.
De los que sabemos que no hay mayor recompensa que la que llega fruto de la voluntad inquebrantable de un esfuerzo extraordinario.
Aquí estamos las y los priistas que conocemos el territorio, que caminamos la calle, que estamos bajo la lluvia, que estamos bajo el sol, que no nos doblamos, que no nos echamos para atrás y que desde aquí le decimos a la militancia: vamos a impulsar el proceso de reflexión más amplio, vamos a regresar y vamos a volver a ganar, porque esa es la mística del Partido Revolucionario Institucional.
Y hay que decirlo compañeras y compañeros, no somos pocos, para que luego no digan: les hizo falta llenar dos, tres sillas, ya saben.
Aquí están los que tenemos la responsabilidad y el compromiso de participar en este proceso, aquí esta nuestra militancia representada, no somos pocos y en este momento claro que no somos los que quisiéramos, pero somos suficientes y somos los que vamos a librar al PRI del letargo, de las ataduras del pasado, para llevar a nuestro querido partido a un mejor lugar posible.
Vamos a trabajar todos los días sin descanso, por ello, como lo señalé, nos llama una reflexión amplia y profunda.
La realidad de nuestro partido en el contexto local, estatal y nacional exige que revisemos a detalle nuestra identidad, nuestras estrategias y nuestra manera de hacer política.
Siempre será importarte recordarle a la gente todo lo bueno que hizo el PRI por nuestro país y, por supuesto, que debemos de seguir informando a las nuevas generaciones para que conozcan los grandes logros de nuestro partido.
Pero ya no basta con aferrarse a las victorias del pasado, ni apelar a la nostalgia de la gente. Hoy tenemos que plantar los pies en el presente y alzar la vista ´para el futuro.
Comenzar a trazar el nuevo horizonte de nuestro instituto político y determinar cómo transitaremos a una nueva etapa como instituto político y cómo serviremos mejor a las familias mexicanas.
Es el momento, compañeras y compañeros, de abrir las puertas a la reforma integral de nuestro instituto político.
Una reforma que pase por las ideas, por las propuestas, por la estructura, por la organización y por nuestra relación con la sociedad y el resto de los actores políticos.
Seguiremos la ruta de trabajo ordenada y sistemática que nos permita generar información verídica y oportuna sobre la estructura del PRI a nivel nacional y en todos los rincones de nuestro país.
De manera que tengamos una visión amplia y comprensiva sobre lo que hoy tenemos en nuestro instituto político
Convocaremos de manera puntual a la instalación de seis comisiones para la reflexión, que trabajarán en paralelo y de manera permanente durante los próximos meses.
Las comisiones tendrán objetivos y tareas específicas que nos permitan cubrir todos los frentes que la reforma del PRI deberá observar.
Instalaremos la Comisión de Análisis Cualitativo y Cuantitativo, a fin de examinar datos que sean producto de investigaciones, de estudios antropológicos, sociológicos, estadísticos, que tengan que ver con el papel del PRI en el sistema político mexicano e internacional.
A la par, trabajará la Comisión de Diagnóstico Electoral, que deberá evaluar el desempeño del partido en las elecciones a través del análisis exhaustivo de los resultados, tendencias y dinámicas electorales.
Este será un trabajo que el Comité Ejecutivo Nacional realizará de manera estrecha con las y los delegados del partido, con los secretarios regionales, con el Comité Nacional, con las y los presidentes en las entidades federativas, y con todas las dirigencias municipales y representación en los más de 2 mil 400 municipios que tiene nuestro país.
Asimismo, se instalará una Comisión de Comunicación, con la finalidad de crear un espacio estratégico dedicado a la planificación, coordinación y evaluación de las estrategias de comunicación del partido.
Es fundamental que comencemos a fortalecer, a cambiar la imagen pública del PRI, a mejorar la relación fuerte, sólida y permanente, a dar información permanente a los medios de comunicación, y garantizaremos que nuestro mensaje llegue a todos los sectores que les interesan a todos y cada uno de nosotros.
Igualmente, será importante la instalación de la Comisión de Diálogo con la Militancia, de cohesión y de fortaleza interna, que tendrá una enorme responsabilidad: la de salir a escuchar y recuperar el sentir de las bases priistas.
Lo hemos señalado antes y estamos aquí para reiterar que el PRI no volverá a ser un partido de élites y de notables, jamás regresaremos a ese partido que tanto daño le hizo a la militancia.
Con la militancia y con los jóvenes vamos a avanzar e impulsar el profundo cambio y renovación en el PRI.
Hoy tenemos que cerrar la brecha entre los liderazgos, las dirigencias y los priistas de a pie.
Asegurar que la voz de la militancia se escuche y se respete, que las decisiones que se toman en el PRI tengan resonancia y retroalimentación de las bases.
Habremos también de instalar la Comisión para la Reflexión con Expertos, para analizar desde un enfoque multidisciplinario, con una perspectiva nacional e internacional, todos los aspectos relevantes del partido en el contexto de su proceso de renovación institucional.
Estamos convencidos de que abrir la conversación a las y los expertos aportará una perspectiva amplia, de grandes conocimientos especializados, para evaluar el estado actual del PRI y proponer estrategias efectivas para nuestra reforma.
Estamos muy interesados en conocer de viva voz la experiencia de partidos nuevos o históricos de todo el mundo, identificar las claves de la manera en que se han sobrepuesto a los grandes y específicos desafíos, afinar la política de alianzas y nutrir nuestro trabajo político con casos de éxito y de buenas prácticas.
Y por último, y no menos importante, será la instalación de la Comisión de Consulta con la Sociedad Civil, un puente de comunicación y colaboración directa con las organizaciones de la sociedad civil.
Estamos conscientes de que debemos fortalecer nuestras alianzas con las organizaciones que verdaderamente tienen un vínculo con la ciudadanía; aquellas que nacieron para cubrir las deficiencias de los gobiernos, que trabajan y que muchas veces sin el debido apoyo y reconocimiento están en defensa y en el apoyo y respaldo de los sectores más vulnerables.
Queremos que la ciudadanía se involucre en el proceso de renovación del partido, de darle un nuevo valor al vínculo histórico que nos ata con la sociedad.
Serán meses intensos de trabajo.
Necesitamos escuchar a cada priista, valorar cada opinión y construir juntos el partido que México necesita.
No daremos pasos en falso.
Lo que sí haremos es aclarar el camino y coordinar efectivamente todos los esfuerzos del partido para volver a ganar.
El PRI, el rescate del PRI, es ahora, amigas y amigos.
Habremos de trabajar juntos y en equipo y lo digo claro y firme, rumbo a la elección intermedia del 2027, el PRI no tiene tiempo que perder y no hay espacio para errar.
Esta es una gran oportunidad y no pretendemos esconder que la reforma del PRI conlleva también un claro sentido de cercanía, de pertenencia.
Pero así como el PRI ha confiado en esta dirigencia nacional para encabezar sus destinos, esta dirigencia tiene total y absoluta confianza en nuestra militancia.
Confiamos en la fuerza, en los buenos resultados, en los buenos gobiernos de nuestro partido, estatales y municipales.
Confiamos en el carácter, en el compromiso y el talento político de nuestras legisladoras y de nuestros legisladores federales y locales.
Confiamos en la cercanía y la participación en la toma de decisiones de nuestros síndicos y regidores, de nuestras presidentas y presidentes municipales.
Confiamos plenamente en nuestros sectores y en nuestras organizaciones: en el sector campesino, en el sector popular, en el sector obrero, en las mujeres y en los jóvenes, en nuestros organismos especializados.
Confiamos en la lealtad y en la voluntad de hierro de nuestras estructuras estatales, municipales y en nuestros seccionales, en los liderazgos naturales.
Yo quiero decirles, amigas y amigos:
Somos nosotros y nadie más, las y los priistas, quienes les vamos a devolver esencia, identidad, orgullo y lealtad a nuestro instituto político.
Por ello les digo, amigas y amigos, en este ejercicio inédito de democracia interna, también tengo que reconocer de manera muy, muy especial, que hoy nos acompañen en este proceso de renovación de la dirigencia, observadores internacionales que hoy están aquí de distintos países, de Brasil, de Honduras, de Uruguay, de Chile, de Perú, de Haití, de Jamaica.
Gracias a quienes hoy nos acompañan, que es muy importante su presencia.
Amigas y amigos, la reforma del PRI se da en un contexto especialmente retador para el presente y el futuro del Estado mexicano, de la República, del equilibrio de poderes y de la democracia como la hemos construido.
Hoy queremos reiterar, y lo digo firme, claro y contundente: hoy queremos reiterar nuestro respaldo absoluto a toda la Suprema Corte de Justicia de la Nación, al Poder Judicial, a Magistradas y Magistrados, a juezas, a jueces, a trabajadoras y a trabajadores del Poder Judicial, porque en su labor crucial para garantizar el Estado de Derecho y acceso a la justicia, depende de su capacidad, de su formación, de su profesionalización, pero sobre todo de ese ánimo y esa trayectoria que han construido al interior del Poder Judicial.
A esas mexicanas y a esos mexicanos, desde el Partido Revolucionario Institucional les decimos: todo el apoyo y todo el respaldo de nosotros.
Lo digo como es: el PRI no apoyará reforma alguna al Poder Judicial que busque mermar su independencia, debilitarlo frente al resto de los poderes constituidos.
Politizar la carrera judicial es un grave error y no hay experiencias que señalen lo contrario.
La reforma judicial en ningún sentido beneficia el acceso a la justicia de las y los mexicanos.
Y el PRI no va a acompañar ninguna asonada en contra de nuestro sistema de pesos y contrapesos institucionales.
Hoy también desde aquí, como lo hemos hecho de manera firme, clara y categórica, absoluto respaldo, total respaldo, a las instituciones autónomas, al Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación, a sus Magistradas y a sus Magistrados, nuestro respaldo en sus decisiones.
Y también al Instituto Nacional Electoral, órgano que hemos construido durante décadas los mexicanos. Hoy le reiteramos al Instituto Nacional Electoral nuestro absoluto respaldo y compromiso siempre con la democracia y con la autonomía del INE, aquí en nuestro país.
Amigas y amigos:
Jamás hemos cerrado la puerta a acompañar iniciativas del gobierno, siempre y cuando estén bien sustentadas y que representen los beneficios de la población.
Hay que ver hacia adelante, jamás, jamás el PRI ha tomado una decisión que no vaya en favor del pueblo de México.
Lo que vaya en favor del pueblo de México, los priistas no nos vamos a volver a equivocar, porque lo que nos dañó fueron reformas que se apoyaron, que nos alejaron de los ciudadanos, el atentar contra las maestras y contra los maestros, el alejarnos de fortalecer un sistema no solo cercano para fortalecer la seguridad, el equivocarnos y dejarnos llevar por el tiempo y el momento, jamás, nunca más.
El PRI es un partido de base, es un partido progresista, es un partido social, es un partido que está con la gente.
El PRI siempre los ha apoyado, el PRI los impulsó y el PRI siempre va a apoyar los programas sociales, los apoyos que beneficien a la gente, pero también la certeza, la certidumbre para la inversión y el crecimiento en nuestro país.
Asimismo, seguiremos expresando nuestro rechazo a la sobrerrepresentación desmedida de los partidos oficialistas en el Congreso de la Unión y haremos votos para que en esta asignación de curules se refleje con mayor fidelidad la voluntad popular depositada en nuestras fuerzas políticas.
Y hay que decirlo: está por concluir un sexenio que desde nuestra óptica ha sido trágico para los mexicanos.
México enfrenta un entorno de extrema violencia, de inseguridad, salpicado de sus enormes deficiencias en el sistema de salud y educación, un estancamiento de los sectores productivos, del turismo, de la manufactura, retrocesos en todas las áreas relevantes, como el respeto a los derechos humanos, la transparencia y la rendición de cuentas.
Ciertamente no podemos juzgar anticipadamente que el próximo gobierno seguirá a rajatabla la línea del gobierno actual, pero lo que sí podemos decir es que queremos que se escuche fuerte y claro.
Este gobierno que concluye en el último día de septiembre ha sido un gobierno que no le gusta la democracia, que no respeta a la oposición, que persigue a la oposición.
Por eso siempre esperaremos que el nuevo gobierno que está por iniciar convoque al diálogo, a la conciliación, al trabajo por nuestro país.
Pero lo que sí vamos a dejar claro es que el PRI será un partido opositor, una oposición firme, clara y contundente para impulsar los grandes retos que México necesita, que vamos a defender la democracia y que vamos a defender las libertades de las y los mexicanos.
Por ello, seremos críticos y escrutaremos cada paso del nuevo gobierno para señalar cuando sus acciones eludan el interés de los mexicanos.
Defenderemos las instituciones, defenderemos la República y defenderemos la democracia.
En un partido como el PRI, la unidad es crucial para alcanzar nuestras metas. Buscamos la unidad que amalgame los esfuerzos del priismo nacional, pero la unidad también se nutren nuestra diversidad y el reconocimiento de todas las expresiones que coinciden en lo fundamental, que es concretar la reforma más profunda en el partido.
México cambia a pasos de gigante y cada vez enfrentamos desafíos más complejos.
Está claro que las posturas, las propuestas y las respuestas del PRI deben de venir del diálogo, de la inclusión y del consenso.
La unidad que hoy tanto necesitamos exige superar cualquier interés individual o faccioso que amenace con fragmentarnos.
Nos invita a escuchar, a mostrar apertura, a ser tolerantes y a construir acuerdos que nos fortalezcan como instituto político.
En tiempos de incertidumbre, es la unidad de las y los priistas la que nos mostrará el rumbo. No tengo duda, la fuerza que nos permitirá dar los pasos necesarios para la reconstrucción del PRI, para la profunda reforma al partido, es nuestra unidad.
Hoy necesitamos más que nunca de la lealtad de las y los priistas. Hoy necesitamos más que nunca de la lealtad de las y los priistas, la lealtad que respalda las definiciones del partido.
Con firmeza y convicción unamos esfuerzos, talentos, voluntades para reconstruir el PRI sobre bases sólidas y renovadas.
Cada uno de nosotros tiene un papel en este proceso. Nuestro éxito dependerá de la capacidad de trabajar juntos y en equipo para construir puentes y ser verdaderos promotores del cambio.
A los jóvenes priistas que están aquí, a los veteranos, a los líderes locales, nacionales, a todos, les digo que su participación es crucial; a todos los dirigentes les digo, a todas las y los priistas les digo: su participación es crucial, su compromiso es clave para nuestro éxito.
Hago un llamado a todas y a todos para que sumen esfuerzos para impulsar la renovación con entusiasmo y con mucha determinación.
Juntos vamos a construir al mejor PRI, al más fuerte, al más inclusivo, al más relevante de este siglo.
La tarea es grande, pero juntos somos capaces de enfrentar cualquier reto.
Hoy, amigas y amigos, el contexto que vive nuestro país es complicado, es difícil, están en riesgo las instituciones y la democracia.
Nos convoca no solo a ser priistas convencidos y comprometidos, nos convoca a ser mexicanos con carácter, con determinación de no echarnos para atrás, de no tenerle miedo al poder, de eso significa defender la patria y defender la República, de tener carácter y de tener convicción, de no tenerle miedo a las campañas de calumnias y de difamación.
No nos van a doblar.
Hay mucho PRI, vamos todos y vamos a ganar.
¡Qué viva el PRI!
¡Qué viva el PRI!
¡Qué viva el PRI!
¡Qué viva el México!
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